Meses atrás Hector García escribía sobre mirar las nubes para saber de próximos terremotos, el método ha permitido hacer 50 predicciones en los últimos 10 años de los cuales 38 fueron correctos.
Aparentemente, el origen de estas “nubes sísmicas” tiene relación con el vapor de agua que viene del interior de la tierra y que se escapa en forma de vapor por las grietas o rupturas de la falla, que al encontrarse con aire frío forma las mencionadas nubes con su característica forma.
El origen de la nube está en el vapor de agua procedente del interior de la tierra que se escapa por las grietas del terreno que anteceden a la falla. Al entrar en contacto con el aire frío, las partículas de agua caliente en ascensión forman nubes de aspecto concreto.
Ahora están apareciendo videos e imágenes como el que acompaña esta anotación de posibles nubes sísmicas sobre los cielos de China antes del terremoto que afectó al país hace unos días.
A mi me sigue maravillando (en un estricto sentido de observación) cómo la naturaleza tiene su forma tan peculiar de manifestar una reacción a un suceso tan fuerte como un terremoto.
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